Como la factura de la luz y la emisión de CO2 de cada hogar no paran de crecer, antes o después todos nos planteamos cómo hacernos con una casa eficiente.
La eficiencia es la capacidad de conseguir un objetivo con el mínimo de recursos, o en el menor tiempo posible. También la capacidad de lograr más objetivos con los mismos o menos recursos.
Si buscas la eficiencia para tu hogar, te facilitamos unos mandamientos a seguir.
Algunos tienen que ver con la estructura y otros con tus hábitos. Porque solo con la suma de ambos consigues resultados excelentes.
Las 10 claves que te permitirán vivir en una casa eficiente
1. Adapta la casa al entorno
La eficiencia vuelve la vista a los orígenes, cuando los hogares se construían en armonía con las condiciones climáticas y el lugar en el que estaban levantadas.
Tras un paréntesis aisladas del entorno, las casas eficientes tienen en cuenta la orientación, las temperaturas, y vientos o lluvias características de la zona.
Es justo lo que hacemos en Drycon con nuestras passive houses.
2. Ventanas y puertas con aislamiento
Una ventana eficiente es aquella con gran aislamiento térmico, y según datos de la OCU puede reducir hasta un 20% la factura de la luz.
Búscalas con buena estanqueidad al aire y vidrio de doble o triple acristalamiento, con rotura de puente térmico.
Por su parte, las puertas deben tener buen aislamiento térmico y acústico, y estar ajustadas a la perfección para evitar que el aire se cuele por las rendijas.
Y tener una buena puerta o ventana no lo es todo, tienen que ser instaladas por un profesional. Los mejores son los que trabajan con el estándar PassivHaus.
3. Aislamiento en la envolvente y el tejado
Lograr la máxima eficiencia energética en tu hogar pasa por aislarlo.
Para ello hay que instalar aislantes en el interior o en el exterior. Te recomendamos la segunda opción, ya que el aislamiento en la parte exterior evita los puentes térmicos.
Los materiales más comunes para aislar viviendas son el poliestireno (extruido o expandido) y las lanas minerales (de roca y de vidrio), pero cada vez ganan más puntos los ecológicos.
Son más amigables, se pueden reciclar y crean un entorno más natural. Por ejemplo, aglomerado expandido de corcho, fibras naturales de madera, o papel reciclado.
Un buen aislamiento reduce mucho el consumo en climatización, e incluso es posible no emplear calefacción si tu casa es pasiva certificada.
4. Iluminación natural
Siempre que puedas, tira de luz natural. No corras las cortinas para que entre toda la que pueda. Si no quieres que te observen desde el exterior, hay materiales que dejan pasar mucha luz sin ser visto.
Deja las puertas abiertas para que el pasillo esté iluminado y abre vanos siempre que puedas entre estancias como salón y cocina para que entre la luz.
Cuando necesites encender bombillas, lo más eficiente son LEDs instalados en toda tu casa.
5. Usa termostatos y dispositivos de control inteligentes
Ya sean mecánicos o digitales, los termostatos permiten que selecciones la temperatura ambiental o el tiempo durante el que encender un aparato eléctrico.
En cuanto a los dispositivos de control inteligentes, te permiten encender, apagar o controlar la intensidad de las luces desde tu móvil, bajar o subir persianas, conectar la calefacción…
Ya no es necesario que estés en tu casa para que, gracias a la domótica, funcione de modo eficiente.
6. Agua, la justa
El agua también es un bien limitado que conviene cuidar. Una casa eficiente emplea el mínimo de ella para conseguir los mismos resultados que tienes ahora.
¿Cómo? Lo primero es revisar que no haya ninguna fuga ni en la casa ni en el jardín.
Si riegas el exterior, coloca aspersores o riego por goteo con termostato que los active a primera o última hora. Dentro, es interesante colocar aireadores de agua en todos los grifos, difusor en la ducha y un pulsador de ahorro en la cisterna.
7. Abre las ventanas en los momentos adecuados
A menos que vivas en una passive house u otra casa que cuente con un sistema controlado de ventilación, que garantiza un aire interior saludable sin necesidad de abrir ventanas, es recomendable ventilar tu hogar a diario.
Reduce la concentración del CO2 producido por la respiración, reduce polvo y malos olores, regula la humedad, permite la entrada de sol…
10 minutos son suficientes para ventilar una habitación, pero ese tiempo hay que incrementarlo si vive mucha gente en casa.
En invierno conviene ventilar al mediodía y en verano a primera hora o por la noche.
8. Ajusta tus expectativas al lugar
No tiene sentido vivir en la montaña y pretender que durante el invierno el interior de tu casa alcance 30⁰ C.
La eficiencia tiene mucho que ver con los objetivos que buscas alcanzar en tu hogar y si estos son de por sí muy altos, no es posible caminar en esa dirección.
9. Electrodomésticos eficientes
Instala en tu hogar electrodomésticos con la certificación energética más alta: A+, A++ y A+++
Tu nevera eficiente, por ejemplo, va a enfriar lo mismo que la actual consumiendo mucha menos energía.
10. Emplea materiales sostenibles y recicla
La eficiencia se completa con la sostenibilidad, un parámetro que va más allá de tu hogar, puesto que afecta al medio ambiente.
En la medida de lo posible, emplea productos fabricados con materias primas recicladas y que se puedan reparar o sustituir fácilmente.
Como ves, puedes hacer muchas cosas por avanzar hacia una casa más eficiente. Pero si quieres alcanzar el más alto estándar de eficiencia, tu objetivo es una passive house.
Si estás interesado en ella, en Drycon tenemos experiencia y te explicamos todas las ventajas de la casa pasiva. La eficiencia es solo una de ellas.