La Unión Europea y la ONU están altamente concienciadas de que la sociedad alcance un desarrollo sostenible y, en el apartado constructivo, el estándar Passivhaus cumple con todos los requisitos para lograrlo.
Para centrar esa ambiciosa meta, la ONU estableció los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) para lograr en 2030 en diversos campos interrelacionados entre sí.
Y la Unión Europea los ha integrado en una ambiciosa hoja de ruta, con el objetivo de reducir en un 80% las emisiones de gases de efecto invernadero.
¿Cuál es el plan? Veámoslo con detenimiento.
Los objetivos de la ONU en busca de un mundo mejor
El origen de casi todas las acciones de desarrollo sostenible parten de la iniciativa de la ONU.
En septiembre de 2015, este organismo señaló 17 objetivos alcanzables en un plazo previsto de 15 años, que se centran en añadir al crecimiento social el ingrediente de la sostenibilidad.
Aunque los ODS tocan aspectos tan alejados entre sí como la eliminación de la pobreza y el hambre, el cuidado de la vida submarina o la creación de ciudades sostenibles, se pueden trabajar cooperativamente.
Y, de hecho, el último punto consiste en crear alianzas para alcanzar los objetivos.
Cómo el estándar Passivhaus contribuye a los objetivos de la ONU
El Passivhaus Institut considera que su estándar de construcción conecta directamente con varios de los objetivos globales, colaborando en su consecución.
¿Cómo lo hace? Contribuyendo en ocho aspectos principales de corte social a alguno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible establecidos por la ONU.
Salud y bienestar
Las casas pasivas certificadas proporcionan un entorno rentable, resistente y saludable para todos los que viven en su interior. Ellos se benefician de confort climático y un entorno ventilado que promueve la salud.
Creación económica y de empleo
La construcción de casas pasivas impulsa la economía, creando oportunidades laborales para los profesionales del sector. Esto abarca un abanico que va desde la fabricación y edificación, hasta el diseño de casas y el desarrollo de nuevos materiales.
Vivienda social y pobreza energética
Debido a que las passive houses tienen una alta eficiencia energética, demandan poca energía de calefacción y refrigeración. Esto ayuda a combatir la pobreza energética y son un buen sistema constructivo a emplear en vivienda social.
Educación
La difusión de información acerca del impacto ambiental positivo que produce la construcción de edificios pasivos, y la formación de profesionales, educa a la sociedad en sostenibilidad.
Además, se hace a nivel internacional gracias al Passivhaus Institut, y a nivel local por los profesionales de cada país.
Edificios resilientes e innovadores
Los edificios pasivos certificados son duraderos y aportan innovación al sector de la construcción, tanto en planificación como en materiales. Resisten mejor los precios cambiantes de la energía, y previenen daños estructurales por humedad o moho, entre otros beneficios.
Consumo y producción sostenibles
Al reducir la demanda de energía, vivir en estas casas está asociado a un consumo sostenible de recursos. Y como en ellas es posible instalar y emplear recursos energéticos renovables, también mejoran el acceso a energías limpias asequibles.
Protección y responsabilidad frente al cambio climático
Al emplear estándares de construcción sostenible, una casa pasiva actúa como elemento protector del medio ambiente. Los materiales son de producción responsable y están certificados.
Cooperación internacional
Los métodos constructivos de las passive houses son iguales para todos los países, y cuentan con una comunidad internacional agrupada en torno al Passivhaus Institut. Esto refuerza la protección al clima y la construcción sostenible a gran escala.
El estándar Passivhaus, alineado con la normativa europea
Para poner en marcha medidas concretas que permitan alcanzar los 17 objetivos de la ONU, en diciembre de 2019 se presentó el Pacto Verde Europeo.
Con él la UE pretende establecer una nueva estrategia de crecimiento basada en una economía sostenible que sea climáticamente neutra para 2050.
Y uno de los puntos fundamentales implica regular el sector de la edificación, uno de los que más han contribuido al cambio climático y que tiene un amplio margen de reducción de emisiones.
En Europa los edificios producen el 36% de las emisiones de CO2, a la vez que consumen el 40% de la energía. Y el 97% de los edificios actuales son ineficientes.
De estas cifras se concluye que el sector constructivo es crucial para alcanzar los objetivos medioambientales.
Para lograrlo, la UE ha ido aprobando diversas directivas que la ley española ha traspuesto en el Código Técnico de Edificación.
Pero hay un estándar que va más allá, y es el otorgado por el Passivhaus Institute.
Se aplica tanto a casas y edificios nuevos, construidos siguiendo los parámetros de esta entidad, como a construcciones rehabilitadas.
El consumo energético de las viviendas certificadas Passivhaus es mínimo, puesto que aprovechan las cualidades del entorno.
Además, las emisiones generadas son ínfimas.
Y los materiales son sostenibles y reciclables. Ya sea el acero empleado en la estructura o los materiales naturales aislantes, como la fibra de madera.
En Drycon Systems solo construimos casas pasivas certificadas, lo que equivale a decir que estamos comprometidos con un estilo de vida sostenible que permita el crecimiento, respetando el medio natural.